La granalla esférica se fabrica atomizando el metal fundido por medio
de agua a presión. De esta forma obtenemos las granallas en sus diversos
tamaños sometiendo las mismas a diversos tipos de tratamientos térmicos,
según requerimiento.
Nuestro abrasivo es fabricado con el más alto grado de compromiso y asegurando la calidad que siempre fue característica en nuestros productos, consecuencia de un riguroso control de fabricación, desde la selección minuciosa de la materia prima hasta el estricto control de proceso y producto final, hacen que la elección de nuestro producto se traduzca en una satisfacción garantizada para nuestros clientes.